LOS DESAPARECIDOS DEL INFORME, UNA HERIDA ABIERTA
LA VOZ DE JALISCOTEMAS SOCIALES
Mónica Calles Miramontes


LOS DESAPARECIDOS DEL INFORME, UNA HERIDA ABIERTA
Dijo que lo que no se nombra no existe. Entonces, ¿por qué ella no los nombró? Se dice que mientras los recordemos seguirán presentes y no llegará el olvido, pero ella los olvidó.
Entre la arenga y parafernalia, la presidenta Claudia Sheinbaum invisibilizó el dolor de miles de madres, padres, hijos y hermanos que buscan a un familiar desaparecido.
Para la presidenta de México, uno de los mayores problemas del país no merecía ni una sola mención en la presentación de su primer informe de gobierno. Tan solo dos días antes madres buscadoras marcharon frente a la glorieta de los desaparecidos y protestaron por la indolencia del gobierno.
El primero de septiembre no fue un día de rendición de cuentas, fue un día de autoelogios y vanagloria. Una vez más, el gobierno sofocó el llanto de miles de madres buscadoras.
Al día siguiente, analistas y medios de comunicación hablaban de todo lo que sí se dijo en el informe de gobierno. Confrontaban cifras, estadísticas y datos que la presidenta mostró; pero poco o nada se hablaba de lo ausente, de aquello que agrieta una profunda herida en México. No se hablaba de desapariciones.
La cruel indiferencia fue la respuesta a la aterradora realidad. Prefirió rehuir al tema, porque ni en el México de los “otros datos” podría enfrentar su incapacidad de dar resultados.
En el primer año de gobierno de Claudia Sheinbaum las desapariciones en México duplicaron el porcentaje de incremento; es decir, pasó del 6% al 12%.
Esto ha ido en alarmante crecimiento en los últimos tres años de los gobiernos morenistas. En 2023, estando en la presidencia López Obrador, el incremento fue del 7.3%, y en 2024 del 6.3%. Con Claudia Sheinbaum se ha duplicado (12%), de acuerdo con los datos del informe Nacional de personas desaparecidas 2025.
Nada hay que festejar ante tanto dolor e incapacidad del gobierno, pero la presidenta decidió hacer una gira por toda la República y convertir lo que debería ser rendición de cuentas en un vulgar mitin partidista.
¿Qué hará la presidenta cuando en su gira llegue a Campeche? ¿Podrá explicarles que no llegaron todas porque las desapariciones de niñas y mujeres ha aumentado un 55% en el primer año de su gobierno?
¿Se atreverá a decir en Chiapas y Ciudad de México que en su gobierno “feminista” las desapariciones de niñas y mujeres aumentó en un 45%? Lo mismo en Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Nayarit y Sinaloa donde los casos de mujeres y niñas aumentaron en más de un 20%.
Así, una vez más los desaparecidos de México son desaparecidos por el gobierno.
Mientras la presidenta derrocha recursos públicos en actos de campaña, carga consigo un silencio estruendoso: el de las madres buscadoras que, al escarbar la hendida tierra, le gritan al mundo: ¡No, no llegamos todas!
